Yo me quedé pensativo y desconcertado. Cierto que había gozado el placer del sexo, pero también me sentía usado, agredido en mi autoestima y no pude menos que pensar en lo que había descendido mi vida, al verme reducido a un mero objeto sexual.
Sabía que esto era sólo el principio y deseaba encontrar una solución definitiva a mi vida. Entonces, tomé una decisión y decidí comunicarla a doña Ana. Me puse rápidamente los pantalones y salí al pasillo.putas madrid - jovencitas colegialas - gordas guarras - jovencitas folladas - video de sexo gratis - sexo amateur
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario